domingo, 24 de marzo de 2013

Estás por soltar un león

Se siente un aroma en los pasillos.
Alguien ha estado lamiendo las superficies.
Las paredes brillan
y en algún lado sangra una lengua.

Alguien se da vuelta para abrazarme y no estoy.
Me doy vuelta para abrazar a alguien que no está.

En algún lado una lengua sangra,
un bosque sangra,
y no hay más fórmulas
ni tranquilas conclusiones vanidosas.

Sólo un silencio moretoneado
y un brillo de saliva.

Me mirás
y mi cabeza sonámbula se detiene.
Los maniquíes se van cayendo en pleno efecto dominó.

En tus ojos hay un bosque que sangra.

Me mirás,
la bestia estratégicamente colocada en tus ojos,
me mirás,
me soltás un león.

Sepulturas de bolsillo


















“No nos quedan pozos del tamaño que buscás.
Sólo hay sepulturas de bolsillo.”
Me aseguran que tu cuerpo entrará
una vez que se haya drenado la herida,
la tinta de tus tatuajes.
Sacarán la corteza de tus huesos.
Serás liviano y blando,
una síntesis cruel de pájaro,
un resto masticable,
otro avance
de la supuesta posguerra.

jueves, 14 de marzo de 2013

Eyes of jade

There you sit, naked and made of stone.

I'd like to climb up to your head and put you in motion;

to see from your eyes of jade.

jueves, 21 de febrero de 2013

Adversarios


                                                   Max Ernst

I.

El gran suspiro colectivo
de los perros del barrio
cuando se cansan de ladrar.

Mis adversarios
son los pájaros al mediodía
y tu nombre que se oye porque sí.

Entraña estrepitosa
¡Basta!

Un pelotazo demente al aire,
un intento de resucitar el viento
para que se lleve el día
de una vez.

II.

La luna y su amarillo espeso,
apenas transitable.

Algo tiembla en el horizonte:
una hoja o una mano
que sostiene un fusil,
un pájaro dormido en una rama,
una epilepsia secreta.

Tiembla
el burro en la cima de tu furia.

III.

Anoche el silencio mayor fue el tuyo
y yo (la causa principal de mis desgracias)
quise arrancártelo, tirarlo lejos,
besar tu frente y tus párpados,
dejándote sólo el olvido y mi nombre.